Aprovechando la oportunidad de renovar su sede global en Chicago, la nueva oficina de JLL está diseñada para crear un entorno productivo, flexible y centrado en las personas para 1200 empleados.
Gensler y Big Red Rooster se encargaron de la reforma de oficina de la empresa de servicios inmobiliarios comerciales JLL, ubicada en Chicago, Illinois.
JLL reformó por completo seis pisos para más de 1,200 empleados actuales que fueron fundamentales en la configuración del espacio. El resultado es un entorno flexible y centrado en las personas. Además, esta reforma refuerza su cultura, apoya el bienestar y promueve la productividad.
Las nuevas estaciones de trabajo, llamadas Studios, están diseñadas teniendo en cuenta la flexibilidad y la colaboración. Cuentan con escritorios de altura ajustable con paneles de privacidad que absorben el sonido que constan de total movilidad junto con el escritorio. Y cada escritorio está equipado con un monitor incorporado. Todos los muebles principales tienen ruedas para que sus empleados puedan adaptar su entorno a sus necesidades.
La renovación presenta un nuevo espacio de recepción de dos pisos acogedor, con ventanas orientadas hacia el este que capturan el sol de la mañana y las impresionantes vistas del lago. Las mesas altas están equipadas con fuentes de alimentos y todo el espacio cuenta con Wi-Fi. Tres pantallas táctiles grandes muestran videos, noticias y contenido interactivo que cuentan la historia de JLL.
El Club de dos pisos de JLL es su nuevo espacio común para empleados. Con WiFi, muchas fuentes de energía y una variedad de opciones de asientos, los empleados pueden trabajar solos, tener reuniones o socializar. El gran comedor contiguo al Club fue diseñado a medida para reuniones interactivas. Sus puertas se retraen por completo para crear un espacio flexible y abierto para adaptarse a cualquier estilo de reunión o evento.
Esta oficina está certificada LEED Platinum y utiliza los recursos con un equilibrio ecológico a largo plazo. Casi el 100% de la iluminación es LED, y un sistema de iluminación de última generación detecta la iluminación natural para reducir aún más la energía. Un nuevo programa de desechos incluye contenedores de reciclaje personales en cada estación de trabajo. Además, los accesorios de agua de bajo flujo redujeron el uso de agua en un 35 por ciento.