Cargando...Tanto para el diseño o reforma de una oficina, de un local, como incluso para el propio hogar, uno de los factores que se deben tener en cuenta cuando se idean es la iluminación. Lo habitual es que vayas a pasar muchas horas del día en estos lugares, por lo que se debe evitar una iluminación que no sea óptima porque puede acabar siendo incómoda para todos los que vayan a utilizar el espacio.
Suena complicado, pero no te preocupes, para eso está nuestro blog, ¡para resolver todas las dudas!
La importancia de la iluminación
Como ya comentamos en alguna ocasión, la iluminación produce diferentes efectos ya sea tanto en clientes, trabajadores, como en personal, afectando a la productividad, la eficiencia, o el estado de ánimo. Por lo tanto, si vas a realizar una reforma o instalación lumínica, deberías prestar atención a esta cuestión. Una buena iluminación puede proporcionarte ciertas ventajas frente a competidores, además de evitarte disgustos a nivel interno.
Las necesidades de iluminación para un local y la que precisa una oficina no son exactamente las mismas, ya que cada espacio tiene unas características y condiciones diferentes y que hacen que requiera una iluminación exacta para el lugar.
Te contamos las diferencias y qué hay que tener en cuenta en cada caso.
¿Qué iluminación debe tener una oficina?
En primer lugar, lo habitual para iluminar una oficina es utilizar luz difusa, ya que esta ofrece una luz cálida, homogénea, y que ayuda a evitar, sombras, reflejos, y deslumbramientos. Con esto se consigue que la luz no sea un factor que pueda molestar o distraer a los trabajadores.
Otro factor a tener en cuenta es la luz natural. Una combinación adecuada entre luz natural y luz artificial debe ser la que nos guíe para la instalación o reforma. Además, el máximo aprovechamiento de la luz solar ayudará a tener un menor coste eléctrico y ser más sostenibles al no depender solamente de la iluminación eléctrica. Si tu espacio cuenta con muchas ventanas es posible que necesites menos iluminación. Tan importante es aprovechar al máximo cuando la tenemos como disminuirla cuando es demasiada y molesta a la vista.
Además de una instalación de luz general para toda la oficina, dentro de la misma se desarrollan diferentes funciones que pueden requerir más o menos luz. Por lo tanto, el uso de luz focal hacia la mesa de trabajo o el ordenador puede ser útil para crear un entorno cómodo.
Uno no se siente de la misma manera cuando no está confortable en el espacio, con la luz, con el escritorio, o con la silla, que cuando cuenta con las condiciones óptimas para realizar sus tareas. Por esto debemos contar con el equipamiento de oficina que más se adecue con el espacio y que beneficie a las personas.
Concretamente para el tipo de iluminación que se suele buscar en oficinas lo más habitual y recomendable es el uso de luz blanca, ya que es la más similar a la natural y la más agradable. A su vez esta tonalidad se asocia con la capacidad de mantener la concentración, una característica que se suele buscar en los entornos de trabajo.
Por último, contar con sistemas de control de la luminaria es esencial. Existen diferentes métodos, pero se dividen en tres categorías: mediante cable, bluetooth, o red. En este sentido, un especialista puede elegir la mejor opción para cada caso.
¿Cómo se debe iluminar un local?
En el caso de los locales comerciales, son espacios que tienen unas necesidades lumínicas diferentes a las de las oficinas. Las tiendas, bares, o restaurantes, también requieren una buena iluminación, pero por causas y con objetivos diferentes a los de las oficinas.
La iluminación está considerada uno de los factores por los que una persona se siente atraída para entrar o no a un local, por las sensaciones que le transmite puede intuir si va a ser de su gusto o si va a estar molesto por el tipo de ambiente.
Aunque cada local tiene sus necesidades y especificaciones, y tomando por ejemplo el diseño de restaurantes y bares, lo general es utilizar luz amarilla. Esto se debe a que transmite calidez y comodidad, e inconscientemente invita a quedarse más tiempo en el local y por lo tanto abre la posibilidad de seguir consumiendo.
En cuanto a locales fuera de hostelería como tiendas de ropa o zapaterías, la iluminación puede utilizarse para dar visibilidad extra a diferentes zonas o productos de la tienda a los que interesa que se dirija la atención del público. Destinar más luz o usar tonos que destaquen sobre los generales ayudará a resaltar los productos.
A su vez, aunque para los locales se pueda pensar que la iluminación es importante para la clientela, también hay que plantearla buscando el máximo confort de los empleados, que son las personas que más tiempo pasan en el espacio.
Dependiendo del tipo de local y la intención que se tenga, se pueden emplear diferentes iluminaciones. La general, la funcional o focal, y la ambiental o decorativa.
Para este tipo de iluminaciones las luces que más se suelen usar son incandescentes no halógenas, incandescentes halógenas, leds, fibra óptica, fluorescentes, o halogenuros metálicos.
Con todos los tipos de iluminaciones hay que buscar una temperatura de color que sea acorde al ambiente que se quiere crear. Se pueden usar tonos cálidos, nítidos, o blancos, e incluso combinarlos para conseguir el efecto necesario.
Conclusión
La iluminación adecuada puede generar una gran diferencia en el ambiente de trabajo, sea el entorno o el sector que sea. Al plantearte un diseño para tu oficinal o tu local debes tener en cuenta la iluminación y el efecto que puede provocar en clientes y trabajadores. Por eso, ponerte en manos de expertos en reformas de oficinas y locales será la garantía para acertar.
Fuente de las imágenes: imágenes propias.