Cargando...No nos engañemos: volver a la oficina después de la Navidad, siempre es duro. Tardes con familia, regalos, comida, luces por las calles, relax… De un día para otro debemos cambiarlos por papeleo, correos, reuniones…
Las oficinas en Madrid y las oficinas en Galicia, como en otros muchos sitios, vuelven a llenarse de gente y de vorágine. Y, si no has podido cogerte vacaciones, sentirás que el descanso no ha llegado en diciembre, con los festivos coincidiendo en domingo.
Entonces, ¿cómo podemos afrontar esta vuelta a la oficina y hacerla más productiva? ¿Se puede evitar el síndrome postvacacional? ¿Un proyecto de oficina óptimo puede prevenir el duro golpe de realidad a la vuelta? Que no decaiga el ánimo. ¡Hoy te lo contamos todo!
¿Qué es el síndrome postvacacional?
El síndrome postvacacional se define como “la sensación, generalmente de corta duración, que vive una persona tras un período vacacional cuando se reincorpora a su trabajo y rutinas”. Es decir, la temida vuelta a la oficina.
¿Por qué nos cuesta tanto volver?
Según los profesionales, cuando tenemos que enfrentarnos a la vuelta a la oficina, la caída de la adrenalina es la principal causa de que sintamos cierto estrés, apatía, insomnio, cansancio o falta de concentración durante los primeros días.
Cambiar los turrones por las facturas es complicado, lo sabemos. ¡Pero que no cunda el pánico! La vuelta puede ser mucho más llevadera si el proyecto de oficina de nuestro espacio de trabajo está pensado para generar bienestar y comodidad a los trabajadores. Aunque no lo creamos, un buen ambiente ayuda mucho a superar el duro bache del fin de los días libres…
Y si tu proyecto de oficina no puede ofrecer esto… ¡Quizá sea momento de reformar!
¿Cómo un proyecto de oficina puede evitar el síndrome postvacacional?
Los proyectos de oficina pensados para tal efecto pueden ayudar a que la experiencia de los primeros días de regreso minimice su parte mala y nos haga pensar en las partes positivas. ¿Cómo?
Si nos toca estar presentes en la oficina:
Debemos centrarnos en las ventajas que supone volver a reunirnos con el equipo presencialmente en la oficina. ¡Y no solo hablamos de ocio! Ponerse al día, trabajar en proyectos conjuntos, parar un rato para tomar un café, fijar reuniones, avanzar en proyectos que quedaron a medias antes de las vacaciones…
¿Cómo ayuda un buen proyecto de oficina? ¡Cada cosa en su sitio! Si contamos con espacios pensados para cada una de las actividades que se realizan en la empresa, todo será más sencillo: puestos operativos, zonas de socialización, salas de reuniones, office… ¿Una de las formas más cómodas de hacerlo? ¡Compartimentación mediante mamparas!
Si nos toca teletrabajar:
Organiza tu día, fíjate unas horas y establece un plan. Si el primer día te toca quedarte en casa, no vayas como pollo sin cabeza y, sobre todo, no intentes hacerlo todo en las dos primeras horas.
Sabemos que tendrás cientos de correos sin leer, varias llamadas perdidas y nuevos retos a los que enfrentarte. ¡Tranquilo! Establece prioridades, clasifica tareas y, poco a poco, verás cómo el montón desaparece.
¿Cómo ayuda un buen proyecto de oficina? Para que los que se quedan en casa no se sientan aislados, establecer una reunión por videollamada el primer día de la vuelta los ayudará a centrarse y encontrar en qué punto está la empresa tras un par de semanas fuera.
Si trabajamos en una ciudad grande, como el caso de oficinas en Madrid:
Sabemos que no has echado de menos madrugar, coger el metro o estar atrapado en un atasco. ¡Pero también sabemos que la vuelta no solo trae cosas negativas! ¡Ni mucho menos!
¿Cómo ayuda un buen proyecto de oficina? Si en el caso de tus trabajadores, viven lejos de su puesto de trabajo, ofrecerles soluciones y actividades en la oficina puede ayudarlos a gestionar mejor los tiempos y estar más cómodos con sus rutinas. Espacio de office, gimnasios, clases de idiomas, zonas de espera y descanso… ¡Las posibilidades son casi infinitas en ciudades como Madrid!
Si trabajamos en una ciudad mediana o pequeña, como el caso de oficinas en Galicia:
Si tienes la gran suerte de vivir cerca de la oficina, organiza tu nuevo año con una rutina saludable y aprovecha para tomarte tus problemas desde una nueva perspectiva. ¡Estamos seguros de que eso que ronda tu cabeza desde hace semanas tiene solución! Compártelo con tu equipo, y juntos la encontraréis.
¿Cómo ayuda un buen proyecto de oficina? Los espacios de trabajo no solo deben centrarse en organizar físicamente a sus trabajadores, sino también en lo que no se ve. Tener en cuenta sus necesidades, y que estas estén reflejadas en la oficina, ayudará a crear rutinas de trabajo más saludables y que los empleados estén más centrados y cómodos. Por ejemplo, podríamos plantear una entrada y salida flexible, actividades de team building, gabinetes o talleres de salud mental… ¡Deja volar tu imaginación para que todos se sientan como en casa!
Más consejos para sobrellevar la vuelta a la oficina.
¿Te has quedado con ganas de más? Aquí os dejamos algunos consejos más para convencerte de que, aunque se acaben las vacaciones, no se acaba el mundo.
- Pensar en positivo: si estamos fijados todo el tiempo en lo poco que nos gusta volver, ese pensamiento monopolizará toda la vuelta. Intenta centrarte en las partes buenas, como reencontrarte con el equipo. Si todos pensamos en positivo, el ambiente será mucho más agradable.
- Aprovechar el tiempo libre: cuando dé la hora de salida, ¡acuérdate que no se acaba el día! Todavía hay tiempo para quedar con amigos, salir de paseo, visitar un museo, tomar algo… ¡Puedes probar cosas diferentes cada día!
- Volver a otro tipo de rutinas: otra parte positiva de que se acaben las fiestas, es volver a retomar rutinas de deporte o de comida que, en ocasiones, abandonamos durante los días festivos. ¡Vuelta a la realidad! Tu cabeza te lo agradecerá.
- No volver el día siguiente: y, si puedes permitírtelo, recuerda que puedes guardar un par de días extra tras finalizar la Navidad, para que la vuelta no sea tan inminente. Te reincorporarás con más calma y habrás descansado tras tantos días de fiesta.
Piensa que a todos nos afecta en mayor o menor medida la vuelta a la oficina, pero tú (junto a tu proyecto de oficina) puedes elegir cómo afrontarlo.
Mentalízate, piensa en positivo y… ¡Feliz año!
¡Nuevo año, nueva oficina! ¡Es el momento! Empieza 2023 dándole un cambio a tu espacio de trabajo. ¡Queremos saber qué tienes en mente!
¡Vamos! ¡Quiero reformar mi oficina!
Fuente de las imágenes: imágenes propias, Pexels, Unsplash.