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23.04.2018

Consejos para que su oficina sea un fiel reflejo de su empresa

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La imagen en el entorno de trabajo es tan importante como el logotipo, sus colores y el tono de comunicación, debido a que también forman parte de la personalidad de la marca y de su percepción al público. Las políticas de trabajo, la decoración, la cultura corporativa, el trato a sus empleados; todo habla de la visibilidad, amor y empatía de la marca tanto en el exterior e interior de la empresa.

Un buen diseño e interiorismo en su oficina que se enfoque en trasmitir su filosofía y cuente con elementos característicos de la empresa, forman la clave del éxito en las marcas modernas. Si siente monotonía en su espacio de trabajo es hora de que considere realizar una reforma de oficina.

La clave es detectar las necesidades que van apareciendo en su oficina y adaptarse. Tal vez no se de cuenta pero su oficina crece al mismo tiempo que su compañía, por ello debe establecer su ritmo y reglas. Un lugar de trabajo con un estilo establecido y un mobiliario cómodo, ayudará a que sus trabajadores realicen de manera efectiva sus tareas e incluso, aportara un toque atractivo para llamar la atención de nuevos talentos y dar una buena imagen a los clientes.

Algunos consejos que puede tener en cuenta si desea iniciar su propio negocio y diseñar la oficina inicial perfecta.

Estimule la amistad en su oficina

Cuando el trabajo se realiza en equipo siempre es más agradable y ameno con un toque de compañerismo. Para ayudar en la colaboración entre todos, considere implementar una oficina de espacio abierto pero en la que se respete el espacio privado de todos, de esta manera podrán interactuar con los demás sin necesidad de levantarse de sus asientos. Esta ambientación es contraproducente para las empresas que requieren de la máxima concentración, es el modelo soñado para aquellas oficinas que busquen inspiración y creatividad en su entorno.

Un espacio colaborativo puede aplicarse a cualquier espacio: un sofá cómodo y un buen café ayudan a realizar reuniones en un ambiente más distendido del equipo, ya que fomentan un ambiente relajado.

Reduzca la jerarquía en el espacio

A medida que crece la oficina y la empresa comienza a tomar forma, las divisiones jerárquicas se acentúan. No tolere la discriminación de los empleados de menor rango y ofrézcales espacios en los que se sientan importantes y en los que no duden de su pertenencia a la compañía. Asegúrese de que todos se sientan libres y cómodos a la hora de disfrutar de cualquier espacio del que disponga la oficina. Evite las áreas de trabajo aisladas o alejadas de los altos cargos, a lo mejor la mejor idea viene de un nuevo empleado. De esta manera permite que todos expresen sus ideas de forma igualitaria.

No descuides la privacidad personal

Aunque los espacios abiertos son ideales para los trabajos colaborativos, es importante que se establezcan límites de la privacidad. Pruebe la opción de asientos con paneles divisores que creen un espacio íntimo y agregue pantallas de videoconferencias para que sirva de meetings privados. También, las salas de reuniones privadas son la clave para discutir propuestas, revisiones anuales y rendimiento de los trabajadores sin que se sientan incómodos o invadidos.

Adáptese a todo

El camino de una empresa es una montaña rusa: a veces, se esta en lo alto y, otras veces vienen curvas. Por todas estas modificaciones, su oficina debería ajustarse a los acontecimientos y cambios a los que se vea sometida la empresa. Si la empresa crece, también debería hacerlo su oficina o, si sucede lo contrario, contraerse. A medida que se crean nuevos productos, se ofrecen otros servicios, aumenta o disminuyen el número de los empleados y aparecen nuevos departamentos.

La oficina debe adaptarse y nunca estancarse. Por ello, es muy útil contar con mobiliario flexible que permita transformarlo de acuerdo a las necesidades que surjan, así se ahorra en gastos innecesarios o en reorganizar el espacio de trabajo. En resumen, el diseño de su oficina debe ser un reflejo de la situación de la empresa.

En conclusión, las grandes claves que no debe olvidar para tener una gran empresa son: adaptarse a los cambios del entorno, ser flexibles y mantener a los empleados satisfechos.

 

Fotos: www.officesnapshots.com